viernes, 19 de octubre de 2018

No hay protección sin obediencia


No hay protección sin obediencia
Dios nos ama. En su naturaleza no está otra cosa que amarnos, bendecirnos, guardarnos y protegernos constantemente. Su gracia y misericordia están ahí, no importando incluso que niegues su existencia, como ya lo hemos indicado en otra oportunidad. Él tiene un propósito para tu vida, y eso implica, más que nada, que le deberás amar también.
Y cuando amamos, pues no queremos hacer mal a quien amamos. Así, el novio o la novia, cuando aman a su pareja, sencillamente día y noche buscan la manera de complacerlos, de estar en contacto permanente, de no hacer algo indebido que pudiera perjudicar la relación, no existe envidia entre ambos, no se niegan nada, y en fin, se experimenta una relación en la que el uno ya no piensa más en sí mismo, sino más bien piensa constantemente en el otro.
Pues de ese modo debe ser nuestra relación con Dios.
No debiéramos perder en ningún momento contacto con Él, por eso me gusta el número telefónico de Dios, ¿sabes cuál es? Es Jeremías 33:3 “Clama a mí y yo te responderé”.
Así es, no funciona una relación en la que solo los sábados o domingos nos ponemos de rodillas a orar o a alabarle, eso no tiene mucho sentido. Jesús oraba constantemente.
Y por qué traigo esto a colación, pues porque es parte de una vida en la que nos negamos a nosotros mismos y comenzamos a servir a nuestro Señor Cristo Jesús, (ya no vivo yo, dice Pablo, mas Cristo vive en mí, Gálatas 2:20). Esta nueva vida, de servicio y amor, es lo que nos lleva a obedecer los mandamientos y estatutos del Creador, no por obligación, sino por el amor que le profesamos y por hemos reconocido que Él nos amó primero.
De ese amor incondicional, que todo lo puede, que todo lo sufre, que no tiene envidia y ya no piensa en sí mismo, emergerá la obediencia sincera a nuestro Dios Altísimo.  


¡Bendiciones!!!!






                                                 «EN LA BARCA»
                                                http://enlabarka.blogspot.com
Dios bendiga a Paraguay

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