La protección de Dios
Dios nos guarda y protege constantemente. Su gracia y
misericordia están ahí, no importando incluso que niegues su existencia. Él tiene
un propósito para tu vida y sólo te está esperando a ti para que tomes las
riendas de tu vida y se le dediques al Dios de amor.
El
apóstol Pablo dice, pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer
frente a las artimañas del diablo (Efesios 6:11), dado que a diario necesitamos
esa cobertura del Todopoderoso, pues no vivimos en un mundo de paz y amor, sino
por el contrario, desde nuestros más próximos hasta el que está muy distante y
ni conocemos, pretenden de algún modo esclavizarnos o hacernos algún daño.
Así,
cuantos gobernadores y presidentes no han realizado estragos con su pueblo, a
causa de la locura temporal que les ha invadido y que significó para la gente,
para el pueblo desarraigos, torturas, muertes, pérdida de sus bienes y cuántas
cosas horribles que se pueden citar. Cuando pedimos en oración por nuestros líderes,
por nuestras autoridades, lo que hacemos justamente es rogar a Dios por su protección
divina y que intervenga en el ámbito gubernamental para que toda autoridad esté
sujeta a sus designios y el pueblo no sufra de los estragos que se darían si no
fuera así.
Tu eres mi refugio;
tú me proteges del peligro y me rodearás con cánticos de liberación
Salmos
32:7
Dios es nuestro
amparo y fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia.
Salmos
46:1
Así que podemos decir con toda confianza con el
autor de Hebreos 13:6, “El señor es quien
me ayuda; no temeré. ¿Qué me puede hacer un simple mortal? (NVI). En Éxodo 14:14
nos exhorta, “Ustedes quédense quietos,
que el Señor presentará batalla por ustedes” (NVI).
Todo lo puedo en Cristo que me fortaleza
Filipenses 4:13
Dios
es nuestra protección segura, nuestro Pastor que nada nos hará faltar, que nos
guardará en el día malo, nos resguardará de la opresión y nos dará victoria, en
el nombre de Cristo Jesús.
¡Bendiciones!!!!
«EN LA BARCA»
Dios bendiga a Paraguay
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